Barajar y dar de nuevo

Messi resignado mientras Brasil festeja. Prensa AFA

Finalmente el presagio se cumplió, y Brasil logró estirar la ventaja que lleva jugando como local por Eliminatorias Sudamericanas. Esta vez, su víctima fue la Selección Argentina, a quien logró derrotar por 3-0, en el Estadio Mineirão de Belo Horizonte. La gran figura de la noche fue Neymar, quien jugó e hizo jugar al resto de su equipo. Por su parte, al combinado nacional, ni siquiera le alcanzó la vuelta al once inicial de Lionel Messi, y sigue sin poder volver a sumar de a tres unidades.

Fue un golpe duro para el plantel, sin duda. Los primeros dos goles de la verdeamarela rompieron todos los esquemas que hasta ese momento habían tratado de implementar los jugadores argentinos. Todo se dió, luego de un arranque parejo, en donde los de Bauza trataron de llegar tocando al área rival, y hasta tuvieron una jugada de riesgo de Lucas Biglia, que fue rápidamente desactivada por Alisson.

Pero el destino era otro, porque minutos después de la soberbia atajada, los de Tité abrieron el marcador a través de un formidable disparo de Philippe Coutinho tras superar la marca de Nicolás Otamendi. Luego de este gol, todo se vino abajo. El juego, la confianza y el orden, se fueron escurriendo con el correr del reloj. Y para colmo de males, sobre el cierre de la etapa inicial, el local estiró la diferencia gracias a Neymar que aprovechó un desacople defensivo y puso las cosas 2-0.

Ya con el resultado a favor, el pentacampeón del mundo, se dispuso a aprovechar los espacios que le dejó la visita, que en su afán de descontar, quedó mal parado en reiteradas ocasiones en la defensa. Y fue en una de esas acciones, cuando Paulinho aprovechó su chance y decretó el 3-0 final. Todo esto ante la mirada de su huésped, que una vez más se lo notó flojo y sin ideas.

Una derrota que si bien preocupa por el nivel mostrado por el equipo, no debe ser tomada como una tragedia, ni nada por el estilo, ya que una cosa es cierta: que haya caído con Brasil, es doloroso pero no determinante, porque es el puntero del certamen, y hoy, a nuestra selección, primero le conviene centrarse en los puestos que tiene más cercanos -que actualmente son ocupados por Chile, Ecuador y Colombia, para lograr acomodarse en la tabla de posiciones.

Quienes todavía se encuentran confiados para lo que viene, son los dos máximos referentes de este ciclo:

“Hoy tenemos que estar más unidos que nunca. Todos queremos lo mismo: estar adentro del Mundial”. Lionel Messi.

“Estamos preocupados pero con muchísima fuerza para ponerle el pecho a la situación”. Javier Mascherano.

Por ello, ahora sí, se vuelve imprescindible una victoria frente a los cafeteros, que vienen de empatar en cero con los trasandinos. La cita será el próximo martes en San Juan, y Argentina buscará cortar la racha adversa que ya contabiliza cuatro partidos sin éxitos, tras sufrir dos derrotas e igual cantidad de empates.

Esta vez, no será sólo una prueba de fuego para el plantel, sino también para “El Patón”, que desde su asunción no logra encontrarle una identidad al equipo.

Por Federico Urriza
Imagen Prensa AFA