La Selección mayor festeja mientras la AFA esta intervenida. Prensa AFA

Era un partido especial para el Seleccionado local, que no sólo se enfrentaba al duro equipo chileno, con la herida aún abierta de la final perdida hace menos de un año, sino que también lo hacía contra sus propios fantasmas.

Por un lado, no hay que perder de vista el hambre de gloria que tiene este equipo tras haber perdido aquella competencia, y también la finalísima con los alemanes en Brasil 2014.

Pero lo más resonante, fue la crisis que sufrió la AFA en los últimos días. En la casa madre del fútbol argentino, hubo renuncias de todo tipo y hasta una intervención por parte de la jueza Servini de Cubría, que dejó en manos de la Inspección General de Justicia (IGJ), la decisión de intervenir la asociación, ni más, ni menos. Un panorama, sin dudas, oscuro.

Por todo esto, una vez más, se le exigirá un resultado deportivo al combinado nacional, que encima no logra conseguirlo desde la Copa América de Ecuador en 1993.

Y allí van los conducidos por Gerardo Martino, que lograron anteponerse ante todos estos condicionantes y que, con una gran actuación, lograron maquillar la ausencia de su máxima figura: Lionel Messi.

Por Federico Urriza
Imagen Prensa AFA