En su segunda y última presentación de la gira Europea, Argentina sufrió un grave traspié frente a España. En el Estadio Wanda Metropolitano de Madrid cayó derrotado por 6-1. Los goles de La Roja fueron obra de Diego Costa, Thiago Alcántara, Iago Aspas e Isco Alarcón (en tres oportunidades); el único tanto Albiceleste fue de Nicolás Otamendi.
Si bien pudo haber comenzado con el pie derecho, si Gonzalo Higuaín hubiese estado fino en la definición, al conjunto nacional le costó horrores hacer pie a lo largo de todo el encuentro. Y para colmo los españoles siempre golpearon en los mejores momentos de la visita, y encima por duplicado.
El equipo de Jorge Sampaoli sintió las ausencias de sus principales figuras, sobre todo la del mejor jugador del mundo: Lionel Messi. Ya que faltó un conductor claro para todas las jugadas de riesgo. Como así también el despliegue habitual de Ángel Di María, quien suele ser decisivo en los metros finales.
Por el lado del local, se pudo ver un conjunto aplomado, que tiene la ventaja de saber a lo que juega hace ya varios años. Y que no perdonó ni en una sola jugada a su rival. Y que contó con un jugador clave: Isco Alarcón, quien se mostró implacable y se despachó con un hat-trick.
Sin dudas una derrota dura, de las que no se espera en la previa de un Mundial. Y que se metió en la historia de los peores resultados: por el mismo marcador ya había caído frente a Checoslovaquia (en 1958), y ante Bolivia (en 2009). El técnico de Casilda, será el responsable de torcer el rumbo en los 79 días que restan de cara a Rusia.
Por Federico Urriza
Imagen Pablo Dizeo – pablodizeo.com