En un partido repleto de acción, Liverpool logró la hazaña y se metió en la final de la Champions League.

En los papeles era una tarea titánica. Enfrente estaba el Barcelona de Lionel Messi que venía de ganar 3-0 en el partido de ida jugado en en el Camp Nou. Pero en Anfiel la cosa fue distinta y desde el primer momento el Liverpool comenzó a limar diferencias y a descontar. Corría el minuto 7´ cuando Divock Origi puso el 1-0 para el local.

En el complemento Georginio Wijnaldum con un doblete (54´, 56´) empató la serie. Los minutos pasaban, el local se “agrandaba” y el Barcelona trataba de encontrar la solución a un partido que lo encontró perdido desde el comienzo. La estocada final de los ingleses provino de un córner. Alexander-Arnold con su ejecución engañó a toda la defensa del Barça que, desorientada, veía como el Liverpool alcanzaba el gol de la clasificación nuevamente en los pies de Origi (79´).

El rival de Liverpool será el ganador de la serie entre Ajax y Tottenham. El equipo holandés corre con la ventaja de haber ganado en la ida 1-0. En tanto la final se jugará el próximo 1 de junio de 2019 en Madrid. El Barça en esta oportunidad no podrá cumplir su promesa.

Por Redacción
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