El juego del fútbol es tan apasionante y controvertido, que cualquiera que posea un sentido poco analítico del mismo, se considere con la sabiduría necesaria para colaborar gratuitamente a su derrotero de calidad y prestigio bien ganado.

Los jugadores, artistas universales, se han encargado por mas de un siglo de esparcir su talento a lo largo y ancho del planeta, demostrándonos “su arte y expresiones que van mas allá de las consideraciones inoportunas de muchos…”

La magia de muchos genios que han colaborado y contribuido a embellecer este magnifico juego, no encuentra explicación cuando se los arremete con juicios dignos de la usura y el desprecio, la mediocridad de muchos que con una pluma se consideran mas importantes que los primeros actores (los jugadores), suelen herir lo que para la vista del mundo ha sido increíblemente bello, tal ves algún día entenderán que “ellos” no podrán participar jamás de las mejores jugadas que fueron inventadas por instintos inigualables…

El fútbol mundial nos ha entregado los exponentes mas exquisitos que jamás hallamos visto, “ellos” nos enriquecieron con acciones que no podrán descifrar el común de las personas por mas que intenten descalificar “el talento”, que no tiene explicación y raciocinio…

El juego-arte, se celebra con jugadores de una categoría insuperable en lo mental y fundamentalmente en la técnica inigualable que expresan con su juego, aun con la desventaja de que muchos no lo interpretan como tal…

Soy de la opinión que el mismo (juego) deba ser interpretado con un sentido estricto de la ética y la estética, para destacar en los ojos de todos los espectadores una resultante increíble e inimaginable a sus expectativas preconcebidas…

Para continuar con la posibilidad de desarrollo intelectual-cultural y deportivo, admiro con asombro a los que poseen “condiciones naturales inexplicables”, siendo los mismos fustigados por su alto porcentaje de “analfabetismo admitido” y no participativos de una sociedad que intenta por todos los medios de excluirlos. La verdad indica que mientras nos enorgullecen fuera, nos avergüenzan dentro de nuestro (país) por conductas impropias, de quien en muchos casos por no decir la mayoría “los endiosan” y les hacen creer que son pares…

Facundo Alvanezzi (primero de izquierda a derecha) con el equipo de inferiores del Basilea FC

Reflexión final

La realidad me indica que sobrellevar “el peso” de mantener una postura que condice con mi persona, me ha costado y me cuesta una enormidad. Encuentro en la sociedad que habito y deba considerar, una falta alarmante de capacidad de comprensión y “altura cultural” para admitir que existen personas mas preparadas para desarrollar una actividad como “el fútbol”.

Soy un profesional muy apasionado y exigente con mis convicciones sobre este magnifico deporte, debo realizar un esfuerzo muy grande para ser fiel a mis ideas y pensamientos, solo debo recordarme siempre: “que las personas capaces difícilmente sean profetas en su tierra”.

Por Facundo Alvanezzi – Entrenador
Miércoles 28 de Noviembre de 2012