“La comprensión desde la formación para no desnaturalizar el talento”

  • La formación del joven futbolista que esta en gestación entre lo que el instinto le sugiere y la estructura corporal (personal) le autoriza a ejecutar, nos coloca en autos sobre la capacidad o menos que tengamos para distinguir lo que el futbolista esta en condiciones de ejercitar dentro de un campo de juego.
  • Infinidad de veces con extrema celeridad confundimos el talento técnico, con el talento corporal y mental, que orientados los tres conjuntamente, nos guía para no desnaturalizar las condiciones genuinas del futbolista.
  • Los mismos, genéricamente poseen informaciones ocultas que los formadores deberíamos develar y explotar en amplitud y profundidad…aunque sucede que la premura por el resultado abstracto (los tres puntos) opaquen la excelencia que se manifiesta con el juego de quien mas y mejor lo propone, por sobre quien menos y peor sugiere aportar excelencia y estética al mismo.
  • La formación del nobel futbolista conlleva la implicación total del “formador”, fuente genuina de aprendizaje y creatividad. Siendo muy difícil atravesar los caminos del conocimiento generalizado con el desconocimiento del error que nos cultiva para corregirnos y aprender desde la imperfección.
  • Por ello, evolucionar con los mas notos nos orienta para estimular y ayudar a crecer a los talentosos sin desvirtuarles sus condiciones genuinas y naturales.
  • El joven jugador debe crecer con dignidad e idoneidad alejado del “existencialismo” para alcanzar reconocimiento por sus condiciones personales, actuando apoyado fundamentalmente en el “formador” y en la maravillosa expresión individual-colectiva de la modestia y la humildad que “solo” hoy en día algunas almas generosas poseen.
  • Para no desnaturalizar el talento en el futbolista a mi modo de ver, considero que debe tener identidad, ser generoso, educarse en la constancia y el esfuerzo, cultivar desde la infancia la esencia creativa, ser competitivo, ser ganador respetando al rival y fundamentalmente, sentir placer y orgullo de jugar en libertad este esplendido juego llamado fútbol…

Reflexión final

Soy de la opinión que el talento es como la inteligencia, se posee o no en todo tiempo y lugar…por tal motivo, intentar convertir un excelente futbolista, músico, escritor o lo que fuere, en alguien no virtuoso con el elemento que le compete en merito, es algo antinatural e inimaginable a los que amamos el talento como expresión lúdica en su máxima expresión…

Por Facundo Alvanezzi – Entrenador